Gravando com Carlos Mesa(ex-presidente da Bolívia, historiados) el La Paz, Bolívia em abril de 2013.
El documentalista brasileño y su equipo produjeron Misión Bolivia, que resume en 110 minutos el periplo del senador boliviano Róger Pinto. Desvela las presiones, las prohibiciones y los intereses que se juegan. Es crítico del Gobierno de Brasil y lamenta la actitud de Evo Morales.
Un senador ‘olvidado’. Esa fue la historia que cautivó al productor brasileño ‘Dado’ Galvão para hacer un documental sobre Róger Pinto, que pasó 452 días encerrado en la embajada de Brasil en La Paz. EL DEBER fue testigo de parte del rodaje de Misión Bolivia en Brasilia y hoy, que está a punto de estrenarse, conversó con Galvão.
¿Qué datos revela el documental Misión Bolivia?
El documental revela toda la historia que envolvió el asilo del senador Róger Pinto y su fuga a Brasil, coordinada por el diplomático Eduardo Saboia. El documental muestra también las relaciones entre Brasil y Bolivia, la prisión de los 12 brasileños de la barra del Corinthians que estuvieron en la cárcel de Oruro. Nuestro activismo buscaba entrevistar al senador Pinto y demostrar cómo actúa Itamaraty. Los principales protagonistas de la historia son: Eduardo Saboia, Marcel Biato, Róger Pinto, Carlos Mesa, Jorge Quiroga, el senador Ricardo Ferraço, Fernando Tibúrcio y el senador Sergio Petecão.
Intentamos hablar con el presidente Evo Morales, pero él huyó (abril de 2013) de una pregunta hecha por Pilar Celi (periodista peruana que es parte del equipo de producción) sobre el asilo del senador, Morales terminó la conferencia de prensa únicamente por la pregunta hecha por Pilar. Fue muy duro.
Una de las preguntas que muchos se hacen es si Marcel Biato, entonces embajador de Brasil en Bolivia, y Antonio Patriota, excanciller, sabían de la operación para sacar a Róger Pinto de Bolivia, o si fue una decisión del encargado de negocios de la embajada, Eduardo Saboia ¿El documental logra esclarecer esto?
Según el diplomático Saboia, todo era comunicado a Itamaraty, por los canales oficiales de la embajada. Existe en Brasil una presión por parte de los parlamentarios integrantes de la CRE (Comisión de Relaciones Exteriores del Senado Federal, presidido por el senador Ricardo Ferraço) para que Itmaraty encamine (envíe) copias de las comunicaciones entre la embajada de Brasil en La Paz e Itamaraty; los documentos son esclarecedores.
¿Cuál ha sido el rol de la presidenta Dilma Rousseff en el caso Pinto?
La presidenta Dilma solo habló una vez públicamente del caso, (mostrando irritación) para rebatir una entrevista dada por el diplomático Saboia al programa Fantástico, de la Tele Globo, eso sucedió cuando el senador Pinto llegó a Brasil.
Se dijo que las acciones de Itamaraty fueron muy tibias para lograr una solución al caso del senador Pinto. ¿Qué dice el documental sobre eso?
El documental revela que Itamaraty viene practicando la política del abecedario de un partido político (PT–Partido de los Trabajadores), la Constitución brasileña viene siendo dejada de lado, por cuenta de la retórica en la alineación política e ideológica de una supuesta “izquierda” latina inspirada en los hermanos Castro.
Gravando com o ministro da justiça do Brasil,
Eduardo Cardozo em La Paz (abril de 2013)
¿Qué intereses se juegan detrás del caso Pinto?
Brasil concedió asilo al senador Róger Pinto porque él es víctima de persecución política en Bolivia. El Gobierno brasileño reconoce que existe persecución política en Bolivia, si no, no daría asilo político (en tiempo récord) al senador Pinto. No fue la oposición brasileña la que creó todos estos problemas. Los problemas y violaciones comienzan cuando Bolivia no concede el salvoconducto, y Brasil, en vez de presionar al Gobierno de Evo Morales, presionaba y disciplinaba al senador Pinto para que él desistiera del asilo. Cobardía diplomática de Itamaraty, ceguera y autoritarismo de Evo Morales.
¿De alguna manera el Gobierno de Bolivia sabía que en algún momento el senador Pinto saldría de Bolivia así?
Que iría directo para el territorio brasileño, no. Existen versiones de que había una propuesta de conocimiento del Gobierno de Evo Morales, para que el senador saliera de Bolivia por otro país (no directo para Brasil, como sucedió).
¿Cree que en algún momento el Gobierno de Brasil consideró el asilo a Pinto como un “error político”?
Sí, por lo menos en la retórica Evo Morales, Dilma y su padrino político, Lula, son aliados ideológicamente, seguidores del abecedario inspirado en Fidel.
¿En qué medida el presidente Evo Morales influyó en Dilma Rousseff para que tome decisiones respecto a la situación en Itamaraty y del propio Róger Pinto?
Es simple, cuando conversaron sobre el tema, cuando el senador pasó a ser disciplinado con rigor por Itamaraty (fue una decisión de conocimiento de la presidenta). Lo que necesitamos entender es que existe una retórica de alineación ideológica en curso (Argentina, Brasil, Cuba, Venezuela, Bolivia, Ecuador), una retórica totalmente distante de la práctica, y el caso del senador Pinto revela esto.
¿Es cierto que Eduardo Saboia llamó al senador Ricardo Ferraço cuando percibió que lo iban a sancionar y hasta pedirían ‘su cabeza’ por el operativo que sacó a Pinto?
El senador Ricardo Ferraço ha sido ejemplar en la conducción de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, a pesar de estar conectado a un partido (PMDB) aliado del oficialista Partido de los Trabajadores (PT). Él ha desarrollado un trabajo independiente en defensa de los intereses de Brasil, y de respeto a la Constitución brasileña. El trabajo de Ferraço al frente de la comisión junto al senador Alvaro Días y otros senadores ha sido vigilar las acciones articuladas por el Gobierno, que persigue de forma sutil a Eduardo Saboia, Marcel Biato y Manuel Montenegro (consejero de la embajada).
¿El caso del senador Pinto incide en la política exterior de Brasil en este momento?
La política exterior no fue muy debatida en las elecciones presidenciales anteriores en Brasil, pero muchos acciones absurdas cometidas por el Gobierno (Lula–Dilma) en los casi 12 años del PT, colocaron el tema en la pauta de las elecciones de 2014. Por ejemplo, la extraña retirada de los boxeadores cubanos de Brasil, enviados a Cuba de madrugada durante los juegos Panamericanos de Río (2006), las protestas armadas contra la visita de la cubana Yoani Sánchez a Brasil, el caso de la refinería de Petrobras en EEUU, entre otros.
¿Cuál ha sido el rol de Lula da Silva en el caso Pinto y qué peso tiene él en la política brasileña de hoy?
Lula es el padrino político de la presidenta Dilma, sin Lula el PT no existiría, es un líder emblemático, líder principal en la campaña de Dilma, responsable de implantar en Itamaraty la diplomacia que deja de lado la Constitución brasileña y sigue las ideas de un partido político (PT) y sus intereses.
¿Qué importancia tuvo el abogado Fernando Tibúrcio en el caso Pinto?
El abogado Fernando Tibúrcio, no sabía que existía un senador asilado en la embajada de Brasil en La Paz. Yo busqué a Tibúrcio con la idea de recurrir a la justicia brasileña para tener el derecho de realizar la entrevista con el senador Pinto en la embajada brasileña en La Paz (comparaba el caso del senador con el de Julian Assange, que concedía entrevistas libremente en la embajada ecuatoriana en Londres), donde nos negaron la entrevista.
Tibúrcio estudió nuestra idea y desarrolló una tesis de hábeas corpus extraterritorial (el primero en la historia jurídica brasileña). La participación del abogado en el tema fue importante para presionar al Gobierno llevando el caso a la suprema corte brasileña, lo que generó más atención de la prensa de Brasil.
¿Cree que existe voluntad política para dar a Pinto el refugio definitivo que está solicitando al Conare?
No existe voluntad política del actual Gobierno por su alineación política con Evo. Existe presión política, problemas en el Parlamento (Cámara de Diputados y Senado) y en la opinión pública, que presionan al Gobierno de Dilma para que se respete la Constitución brasileña, la tradición y los valores diplomáticos, que garantizan total protección del Estado brasileño al senador Pinto y a su familia.
¿El caso Pinto incomoda al Gobierno de Rousseff?
Sí, mucho. El caso del senador Pinto ilustra que solo hay retórica ideológica entre Brasil y Bolivia, en la práctica existen verdaderas restricciones (cuestiones no resueltas) entre los dos países (nacionalización de la refinería de Petrobras en Bolivia, gas, agricultores en la frontera, contrabando, tráfico de drogas, trabajo esclavo).
¿Qué piensa del Gobierno de Evo Morales?
Desarrolló algunos avances sociales y económicos importantes en Bolivia, pero comete errores cuando no dialoga y no escucha a sus opositores, utilizando las herramientas del Estado (principalmente la justicia) para perseguir a opositores políticos, y se alía con políticos envueltos en corrupción y narcotráfico.
¿El Gobierno de Brasil toma en serio las denuncias que hizo Róger Pinto en las que vincula a funcionarios del Gobierno de Evo Morales con el narcotráfico?
El Gobierno brasileño no toma en serio las denuncias, de lo contrario no habría dejado al senador olvidado en la embajada brasileña, parece ser un lamento del Gobierno de Brasil el haber concedido asilo al senador Pinto.
No hay una política de combate al narcotráfico en las frontera de Brasil, faltan policías e integración entre el Ejército, la Policía Federal, estadual y extranjera, no existen recursos suficientes para el tamaño de la frontera con problemas. A consecuencia de ello se puede ver en varias ciudades de Brasil diversos tipos de drogas, armas de uso exclusivo de las FFAA en manos de delincuentes y del crimen organizado, y el aumento de homicidios.
MISIÓN BOLIVIA SE EXHIBIRÁ EN SAN PABLO
La primera exhibición del documental Misión Bolivia será a mediados de agosto en San Pablo, evento promovido por el periódico O Estadao de São Paulo, con la presencia del senador Róger Pinto, el diplomático brasileño Eduardo Saboia y el abogado Fernando Tibúrcio. Después de la proyección del documental, habrá un debate de-sarrollado por el periodista Roberto Lameirinhas.
Misión Bolivia tiene 110 minutos de duración, está dirigido por el documentalista ‘Dado’ Galvão, y la preproducción en Bolivia estuvo a cargo de Pilar Celi (periodista de Perú) y Arlen Cezar (fotógrafo de Brasil). Galvão cuenta que, en abril de 2013, mientras investigaba sobre Julian Assange, asilado en la embajada de Ecuador en Londres, descubrió que existía un senador boliviano (Róger Pinto) asilado por casi un año en la embajada de Brasil en La Paz. “El senador estaba completamente olvidado”, dice y desvela los inconvenientes con los que tropezaron. “Yo sabía que Itamaraty prohibía que el senador reciba visitas, por eso envié un requerimiento al entonces ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Antonio Patriota. Arlen Cezar, Pilar Celi y yo estábamos en Bolivia cuando Itamaraty prohibió que entrevistáramos al senador. A modo de respuesta y de protesta, Arlen y yo entregamos en la embajada de Brasil en Bolivia nuestros pasaportes con una carta para Patriota, porque esa prohibición violaba la Constitución brasileña y las leyes internacionales. Estábamos delante de una actividad que envolvía cine y activismo, nuestra misión era dialogar y documentar los dos lados de la historia”, argumenta.